La de cosas que cosas que hacemos por miedo y la de ellas que dejamos de hacer por el mismo motivo. El miedo es el motor de este mundo y por ello siempre ves mensajes que te incitan a actuar o dejar de hacerlo metiéndote el miedo en el cuerpo. De esa manera no actúas de manera libre, sino siempre por evitar las consecuencias negativas que te hacen creer que tendrá.
Hoy tengo el placer de contar en mi blog con Bel Silvent para ayudarnos a entender que es el miedo, cómo afrontarlo y transformarlo en un aliado.
Si estás pensando en emprender, seguro que hay una emoción que en muchas ocasiones te paraliza: el miedo.
Hoy vengo a hablarte de cómo vencer el miedo. Esta emoción tan molesta y que seguro que te suena y te da muchos quebraderos de cabeza.
En realidad, el miedo es una emoción que está siempre presente en nuestra vida y deberíamos estar más agradecidos de lo que parece a priori, por lo que nos viene a mostrar esta emoción.
A mí es una emoción que me gusta, y seguro que después de leer el artículo a ti también te va a gustar. Pero primero tienes que aprender a gestionarla y que no te paralice.
Hay mucha gente que habla de controlar el miedo, cosa que en mi opinión es imposible. Cuando sientes miedo ya lo tienes dentro y si no eres consciente de que lo estás sintiendo, se va a interponer entre tú y lo que quieres conseguir.
A mi me gusta más el concepto de gestionar el miedo. Te voy a contar alguna cosa que sin duda va a hacer que esa experiencia con esta emoción sea muy diferente a partir de ahora.
Qué es el miedo
El miedo es una emoción primaria e innata.
Es una de las primeras emociones que se atribuye al ser humano en su evolución y además es una emoción común en todos los animales. Sin esta emoción no estaría garantizada la subsistencia de ninguna especie.
Por tanto, el miedo es vida.
Como todas las emociones, el miedo genera una serie de cambios fisiológicos muy útiles y necesarios. Cuando tienes miedo el cerebro envía más sangre hacia las extremidades, ya que ante el miedo hay dos opciones: huir o enfrentarse.
En ambas situaciones puede que necesitemos usar nuestros brazos y piernas para salir corriendo o enfrentarnos al posible peligro.
El miedo es lo que hace que, si te persigue un león, corras.
El miedo también produce que haya un torrente de hormonas en nuestro cuerpo que nos ayuda a estar más alerta, ante el peligro que se nos presenta. Se intensifica la tensión muscular o se nos dilata más la pupila.
Esto hace que estamos con los sentidos más conectamos e incluso se nos agudizan. Lo que es muy útil.
Ya verás más adelante como puedes aprovechar estos cambios a tu favor.
Saber de dónde viene y y para qué para poder vencer el miedo
Lo habitual es que sientas miedo ante una situación que desconoces y que te resulta ajena a ti. Vamos lo que se llama salir de la famosa zona de confort.
De hecho, el miedo es quien te retiene en esta zona de confort. (Si quieres aprender más sobre las consecuencias de salir de la zona de confort, puedes leer aquí un artículo mío en el que te lo explico).
El miedo también viene de tus pensamientos y experiencias sobre una situación.
Los emprendedores tenemos que lidiar con este miedo constantemente. Venimos de una sociedad que nos ha educado, a la mayoría, a buscar trabajos fijos y estables y siempre lo hemos relacionado más con trabajar por cuenta ajena.
Cosa que, como sabes, hoy día tampoco es cierta. Pero el mensaje queda ahí grabado a fuego en el subconsciente. Siempre que le dices a alguien que estás pensando en montar un negocio, solo su mirada ya te transmite miedo.
Pero el miedo, como ya te he contado, tiene una función fundamental y es que estés prevenido ante situaciones de posible peligro.
Yo recuerdo cuando empecé con mi negocio on line, una de las cosas que más miedo me daba era la tecnología.
Cada vez que tenía que hacer algo con Active Campaign (la herramienta que uso para enviar mis correos de forma automática) me corría un sudor frío por la espalda.
No paraba de pensar: Y si me equivoco y la lío y luego no sé como ponerlo todo como estaba, y si envío 20 mails seguidos a la misma persona…tenía tanto miedo que o bien lo procastinaba, es decir lo dejaba siempre para luego, o bien estaba tan tensa que la acababa liando.
Y estos son los efectos que, a menudo, nos produce el miedo, si no somos conscientes de él. Al hacer ciertas cosas sobre las que no tenemos suficiente información, nos paralizan o nos lleva al desastre.
El miedo aparece cuando tú no te sientes capaz de afrontar una situación. Sientes que no tienes los conocimientos, habilidades o información necesaria para salir airado de esa situación.
Tipos de miedo
Debemos tomar consciencia de que lo que nos pasa es que tenemos miedo. Una vez eres consciente, saber qué tipo de miedo sientes te puede ayudar para poder vencer el miedo de la mejor manera posible.
Básicamente hay dos tipos de miedo: los que llamamos miedo racional e irracional. El primero es uno basado en una experiencia propia o de alguien cercano y tiene más o menos sentido que lo sientas.
El segundo es un miedo que no está basado en ningún dato empírico, sino más bien en algo inventado. Es fruto de tu imaginación. Hay estudios que indican que está basado en la falta de control sobre una situación.
Pero lo más importante es que ambos miedos están en tu cabeza. Ya que aun cuando tu experiencia te dice que una vez te pasó algo negativo con una experiencia, no tiene por qué volver a suceder igual.
Lo que tienes que saber es que, si una situación te da miedo, el miedo te está previniendo. Quizás porque tú tienes menos experiencia en esa área y debes de estar más alerta.
De este modo, cuando yo me siento delante del ordenador y tengo que abrir esa herramienta que te comentaba, me digo a mi misma: esto te sucede porque no tienes ni idea de como usarla, así que debes de estar más alerta y leer bien todas las pantallitas y mensajes que aparecen.
Transforma el miedo en un aliado
Por eso lo importante es no dejarse intimidar por el miedo sino escucharle. Aceptar que lo tienes ante una situación y aprender qué puedes hacer tú para reducirlo la próxima vez.
El miedo viene a decirte algo. Lo que debes hacer es preguntarte:
¿A qué tengo miedo exactamente? Y enumerar tus miedos para poder buscar las distintas soluciones a cada uno.
Si estás pensando en emprender o ya has dado el paso, a menos que sea tu undécima vez, estás cagado de miedo. ¡Confiésalo! No te hagas el duro. Al menos aquí puedes hacerlo, estamos todos en el mismo barco. Yo también tengo miedo.
Miedo al fracaso, miedo al qué dirán, miedo a invertir y quedarme sin dinero, miedo a no ser tan bueno, miedo a volver a empezar, miedo a no saber, miedo a exponerme, a defraudar…¿te suenan? Ya sé que sí. Por que son mis mismos miedos y los de Fernando y los de tantos otros.
Qué hacer con el miedo
Eso no es lo importante, lo importante es qué haces con él.
¿Sabes la diferencia entre un valiente y un cobarde? Que el valiente se enfrenta a sus miedos.
El miedo viene a decirte en qué áreas te sientes más vulnerable o necesitas más refuerzo. Dónde te tienes que poner más las pilas.
Pero también viene a decirte qué cosas son importantes para ti. Las cosas que no te importan, no te dan miedo, ¿a que no? Pero ¿por qué en cambio algo que deseas mucho te da más?
Porque también te enseña lo que es importante para ti, para que estés alerta y lo cuides y no pierdas oportunidades.
Reconocer el miedo
Por eso es muy importante aprender a escuchar también a nuestro cuerpo, que a menudo es quién nos transmite el miedo. Estar alerta de esos cambios fisiológicos que nos lo indican es fundamental.
Yo cuando empecé sentía que algo no iba bien, pero no sabía que era. Hasta que me di cuenta o más bien me atreví a reconocer que lo que tenía era muuucho miedo. En se momento pude aterrizar lo que me pasaba y remediar algunos de los motivos. Otros aun me acompañan, pero en menor intensidad y otros nuevos aparecerán en cualquier momento.
Hay unos miedos comunes que ya te he comentado, y que aparecen cuando el miedo es muy de sorpresa. Si te dedicas a inversiones y cae algún valor en el que tenías mucho dinero invertido, por ejemplo.
Pero hay otras situaciones que son más paulatinas. Por ejemplo, si decides emprender, y si no tomas consciencia y no haces nada, el miedo irá aumentando a medida que se acercan los momentos de grandes decisiones.
En estos casos aparecerán síntomas de tipo dolor de estomago, mal estar, dolor de cabeza, insomnio…aquí es donde tendrás que estar atento y saber distinguir tus propios síntomas ante el miedo.
El cuerpo nunca nos miente. Si tienes algún malestar, pregúntate de donde puede venir.
Maneras de vencer el miedo
En definitiva, hay varias maneras de combatir el miedo. Por un lado, debes tomar consciencia de él. Aparece cuando tú no te sientes capaz de afrontar una situación. Por tanto, hay varias formas de solventar esta situación:
Cultiva el Autoconocimiento: Conocerte mejor te hará sentirte más seguro ante situaciones nuevas. Haz una lista de tus habilidades que te pueden servir ante esa situación.
No estás solo: No nos engañemos. No creo que vayas a hacer algo que nunca ha hecho nadie.
Conocer las historias de otras personas que lo han hecho te reforzará positivamente. Si lo que estás pensando es emprender on-line, aquí puedes leer la historia de 7 emprendedores de éxito. Verás como conociendo a otros emprendedores on-line te sientes menos solo.
Evita las relaciones tóxicas: Ésta es de las mejores. Si tienes una idea y todavía no lo tienes claro y no has tomado decisiones, no se lo cuentes a tu amigo el cenizo que nunca sale de la zona de confort. Ni a tus padres, que no saben ni de qué les hablas.
Cuéntaselo a alguien que te entienda, que sepa de que hablas, que te pueda orientar, animar o dar una opinión que te sirva, no que te desmoralice porque él o ella tienen más miedo que tu.
Rodéate de gente como tú, con ideas y sueños similares a los tuyos y si ellos ya lo han conseguido, mejor que mejor.
Prepárate lo mejor posible: Si ya sabes que el miedo viene cuando no tenemos toda la información necesaria para sentirte seguro. En tu mano está evitarlo.
Empóllate toda la información que puedas encontrar sobre ese tema. Apúntate a webinars, fórmate, búscate un mentor que sepa sobre ese tema. No tienes por qué hacer el camino tu solo.
Aprender a delegar: Si sientes que una situación te genera miedo, también puedes sencillamente evitarla.
Esto es lo que yo he hecho con varias tareas que me quitaban el sueño y que estaban relacionadas con mi miedo a la tecnología. He aprendido lo básico y lo gordo lo delego a alguien que sepa de verdad. Así además de tener más tiempo me siento mucho más segura.
Fíate de tu instinto: El instinto es cuando sientes que sabes algo y no sabes por qué lo sabes. Se debe a que todas las respuestas que necesitas están en ti y en ese momento conectas.
Normalmente nos cuesta verlas, precisamente por el miedo, entre otras cosas. Para mejorar en este paso practica la meditación y el yoga.
Técnica del “que es lo peor que te podría pasar”: Así de simple. Ante una situación de miedo, piensa ¿qué es lo peor que me podría pasar? La mayoría de las veces te darás cuenta de que lo peor no es tan grave y te ayuda a bajar la intensidad.
Y si lo peor es muy grave, seguro que sacas alguna conclusión de lo que realmente te da miedo y cómo lo podrías solventar.
También puedes hacer a continuación lo contrario: ¿Qué es lo mejor que te podría pasar? Para que pongas sobre la mesa lo que arriesgas y lo que puedes ganar a cambio y ver si está compensado.
Receta para vencer el miedo
- Reconoce el miedo, toma consciencia de que tienes miedo
- Acéptalo sin juicio. No pasa nada por sentir miedo. No es bueno ni malo.
- Busca una palabra o varias para definirlo. ¿Qué otras emociones te generan este miedo? ansiedad, pánico, estrés, inseguridad.
- Dónde lo sientes. Reconoce qué efectos físicos produce este miedo en ti: dolor de cabeza, insomnio, dolor de estómago….
- Dale un valor del 1 al 10. Siendo 1 poco miedo y 10 mucho. Te hará darte cuenta de que hay muchos tipos de intensidad de miedo y te servirá para priorizar.
- Qué te ha venido a contar este miedo. De que te está tratando de prevenir.
- Hazte un plan de acción. Que vas a hacer la próxima vez, para reducir ese miedo y que no te paralice.
Como ves el miedo no es tan malo, sino que puede ser un gran aliado si lo que quieres es emprender o estás ya en ello. De este modo aprenderás a colocar al miedo a tu lado, para que te aporte cosas positivas en vez de ponerlo delante y que te paralice.
Y ahora te toca a ti. ¿Qué vas a hacer la próxima vez que sientas miedo? ¿Qué trucos tienes tú para combatir el miedo?
Espero que me lo cuentes en los comentarios. Me encantará saberlo.
Mujer, madre, emprendedora, amante de la libertad y viajera empedernida. Un día decidí dejarlo todo y vivir la vida que realmente quiero, me reinventé personal y profesionalmente y ahora acompaño a personas como tú a poner en marcha su PLAN B, para que puedan vivir una vida feliz y plena. Y tú, ¿a qué esperas? ¡Ponte en marcha ya! Tu primer paso: ¡descarga la guía para poner en marcha tu plan B gratis!
4 comentarios en «Cómo vencer el miedo cuando decides emprender»
Hola Silvina,
Gracias por pasarte y comentar.
Efectivamente el miedo es una de las emociones que más marca nuestras decisiones y por tanto nuestro destino. Si no nos paramos y tomamos consciencia de lo que nos viene a decir, será el miedo quien decida por nosotros.
Me alegro de que te haya gustado mi artículo y que te haya servido.
Un abrazo!
Hola Bel,
La verdad que nunca se me había ocurrido esto de lo que “el miedo es vida” y de que hay algo positivo, por así decir… Nunca se me ocurrió tampoco a relacionarlo con el autoconocimiento. Un post muy instructivo tal vez uno de los principales sentimientos humanos…
Gracias Fernando por invitarme a escribir en tu blog. Espero que mi artículo sobre el miedo ayude a tus lectores y lectoras. Un placer colaborar contigo.
Gracias a ti Bel por querer aportar tan buen artículo en mi blog! 🙂
Las pautas que facilitas son de gran ayuda para que toda persona podamos hacer frente a nuestros miedos y conseguir aquello que deseemos.
Un abrazo